Los empleadores del estado de California han experimentado un incremento considerable en demandas de empleados que solicitan reembolsos por gastos incurridos por trabajar desde casa. Estas demandas buscan reponer una amplia variedad de gastos relacionados con el aumento de los costos de servicios públicos y por los costos de perder la capacidad de alquilar sus oficinas en casa. Los empleados suelen presentar estas demandas en virtud del artículo 2802 del Código Laboral del Estado, aunque también es común que los empleados interpongan acciones derivadas del PAGA por «inexactitudes» en las declaraciones salariales.
¿Qué conlleva esto?
El artículo 2802 del Código Laboral exige a los empleadores que reembolsen a los empleados «todos los gastos o pérdidas necesarios» en los que haya incurrido el empleado en el desempeño de sus funciones o en «obediencia a las instrucciones del empleador». Es importante destacar que el artículo 2802 del Código Laboral aclara que los «gastos o pérdidas necesarias» incluyen todos los «costes razonables, incluyendo, pero sin limitarse a, los honorarios de los abogados en los que incurra el empleado para hacer valer los derechos concedidos por este artículo.»
Muchas empresas de California siguen teniendo empleados que trabajan desde casa o utilizan ahora una estructura híbrida. Estos empleadores deben ser conscientes de sus requisitos de reembolso bajo la ley de California y revisar sus políticas y acuerdos de teletrabajo para asegurarse de que los empleados están siendo reembolsados adecuadamente.
En varios casos, los «costes básicos» más comunes de los empleados incluyen el acceso estable a conexión a Internet, una línea telefónica y dispositivos inteligentes o computadores. Es importante destacar que, antes de la pandemia, los tribunales sostenían que los empleadores sólo tenían la responsabilidad de reembolsar un «porcentaje razonable» de los gastos que un empleado pudiese cubrir en relación con el uso de un teléfono personal o por costes de Internet.
Algunas de las nuevas demandas también exigen el pago de ingresos potenciales que los empleados podrían haber obtenido si hubieran alquilado su oficina en casa en lugar de utilizarla para trabajar. Aunque existe un precedente de casos de este tipo, ninguna autoridad pública parece apoyar la concesión de tales gastos en California, por lo que es poco probable que un tribunal considere que tales gastos teóricos sean indemnizables.