La mayoría de los empleados de California tienen derecho a percibir horas extras. Comunmente, estas horas se pagan una vez el turno o las horas acumuladas por un empleado en una misma jornada sobrepasan las ocho horas al día, más de seis días consecutivos en una semana o más de 40 horas en una misma semana. El pago de las horas extraordinarias se convierte en el doble de la retribución habitual del trabajador cuando éste trabaja más de doce horas en un solo día de trabajo o más de ocho horas en el séptimo día consecutivo de una semana laboral.
En cuanto a si su empleador está obligado a pagar las horas extraordinarias en California, es una cuestión que depende bastante de los hechos. Hay excepciones bajo la ley, pero sólo porque un empleador le dice que no paga horas extras, esto no constituye una excepción valida. Es importante que entienda que si trabaja para una empresa privada, como hace la mayoría de la gente, va a tener derecho a que se le compense adecuadamente por sus horas extras.
En California, hay varias categorías de trabajadores que no tienen derecho a la compensación de horas extras. Algunos empleadores pueden intentar clasificar erróneamente a los empleados para evitar el pago de horas extras. A continuación, revisamos los detalles de estas exenciones. Los trabajadores deben familiarizarse con estas exenciones para asegurarse de que sus empleadores no están negando ilegalmente el pago de horas extras.
Algunos ejemplos de profesiones que suelen considerarse exentas en California son
- Asistentes administrativos
- Ejecutivos
- Profesionales de la informática
- Médicos
- Cirujanos
Además, los contratistas independientes no se consideran empleados según la ley, sino que constituyen una clase distinta de trabajadores. Un trabajador es contratado como independiente si va a realizar un servicio específico, para un resultado específico, por una paga específica. El contratista independiente debe tener el control sobre cómo se completa ese servicio.